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Fecha de actualización: 09/10/2022
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Conocer a tu familia te da la oportunidad de acercarte a tus raíces y comprender mejor de dónde vienes. Durante la edad escolar, es importante que los más jóvenes desarrollen el interés de buscar respuesta a algunas preguntas de su historia familiar. En ese sentido, elaborar un árbol genealógico resulta útil para descubrir tradiciones en las familias, o hasta problemas de salud hereditarios.
Revisa las características y la estructura del árbol genealógico, presta atención al ejemplo y pon todo en práctica a través de los formatos que te ofrecemos para descargar, gratis.
Un árbol genealógico es un esquema que resume la historia familiar de una persona, basándose en sus antepasados y descendientes. En el ámbito escolar, este tipo de trabajos pueden ser útiles para que los niños conozcan el pasado de sus familias y que comprendan la importancia de sus orígenes.
A través de los árboles genealógicos se puede abrir una ventana para conversar con los estudiantes sobre las dinámicas dentro del núcleo familiar, y las tradiciones que pasan de generación en generación. Además, es una actividad que ejercita su creatividad y despierta su curiosidad por investigar.
Los tipos de árbol genealógico se establecen según las clases de relaciones familiares que señale el esquema, y esos pueden ser:
Te explicamos cuáles son las características que acompañan a un árbol genealógico correctamente realizado y útil:
El aspecto más importante de la estructura de un árbol genealógico es decidir la distribución de cada generación de la familia, siguiendo la forma de un árbol o el sentido jerárquico de un esquema de tablas. Presta atención a la explicación:
Antes de comenzar el diseño de tu árbol, es preciso delimitar un espacio para colocar el título y cualquier otro dato destacado, por ejemplo el nombre del alumno y el curso. Esto es necesario para la presentación del trabajo, de modo que el docente pueda ordenar todo el material al calificarlo.
Debes comenzar a dibujar tu árbol por el tronco, que será el lugar donde ubiques tu fotografía o tu nombre. A partir de allí crecerán las ramas y las hojas para seguir estructurando el árbol genealógico. Igualmente, si decides utilizar un esquema de tablas, la base de tu diagrama será el lugar que te corresponde.
Ya que el árbol se trata de ti, debes elaborar un esquema ascendente, es decir, que explique de dónde provienes, incluyendo hermanos, padres y abuelos.
Cerca del tronco se ubican algunas hojas sueltas, o ramas más pequeñas, para representar a tus hermanos con sus respectivos nombres y fotos. Por supuesto, puedes omitir esta sección en caso de que seas hijo único.
Las primeras ramas que están por encima del tronco corresponden a mamá y papá, para identificarlos necesitas agregar fotografías y escribir sus nombres. Presta mucha atención a la distancia con la que separas las ramas, para tener espacio suficiente en la parte más alta del árbol.
Si se trata de un esquema de tu familia más cercana, no es preciso incluir a los tíos y primos. Para ello tendrías que construir un árbol más grande, así que conviene hablarlo antes con el docente.
Hasta la parte más alta del árbol se ubican a los abuelos maternos y paternos, por lo que es necesario sacar dos secciones diferentes, una desde la rama de mamá, y otra desde la de papá.
Existen una serie de etapas que debes considerar mientras construyes tu árbol genealógico, para que puedas trabajar de forma ordenada y sin contratiempos:
Como se mencionó con anterioridad, la creación de un árbol genealógico implica todo un proceso de investigación precedente con la finalidad de recolectar toda la información que resulte necesaria. Evidentemente, la dificultad de esta indagación va a depender de qué tan grande será tu esquema.
Por ejemplo, si solo vas a limitarte a tres generaciones (tú y tus hermanos, tus padres y tus abuelos), lo más probable es que ya conozcas muy bien estos lazos familiares. En cambio, cuando quieres ir más allá e incluir tíos, primos, tíos abuelos, bisabuelos… Será necesario preguntar a tus padres para conseguir esta información.
Una vez hayas terminado de investigar, llega el momento de buscar todos los recursos que podrías necesitar en la elaboración del árbol. En primer lugar, deberías buscar fotografías para acompañar los nombres de todos tus familiares, pues a través de las imágenes puedes generar un mayor impacto.
Los demás materiales se eligen según el soporte en el que construirás el árbol, entonces pregúntate: ¿en formato digital con ayuda de un computador, o como una manualidad? Para la opción digital vas a necesitar un dispositivo electrónico y un programa para diseño gráfico.
Pero si decides hacer tu trabajo a mano, te harán falta hojas de colores, lápices y marcadores, recortes, pegamento, tijeras, reglas, pintura, pinceles, etc.
En ambos casos deberás ajustar el formato. Lo más recomendable es usar la hoja en sentido horizontal y en tamaño carta o A4, para tener espacio suficiente donde distribuir todas las ramas del esquema. Asimismo, es fundamental delimitar los márgenes de una vez.
La mejor forma de organizar todas las ideas que tienes en tu cabeza es trazar borradores antes de trabajar en el árbol, de esa forma puedes jugar con la distribución de cada sección, la combinación de colores y fuentes. Igualmente, es una excelente oportunidad para probar distintas cosas sin ponerle límites a tu imaginación.
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por Redacción Milformatos el 02 de noviembre de 2022